Esta receta es de las típicas de aprovechamiento, ya que la hice un día de lluvia y que no tenía ganas de salir a comprar carne picada para hacer pastel de calabacín, mezclé y mezclé (con los dedos cruzados) y salió una de esas recetas que inunda la cocina de olores ricos y de las que luego de comerla el cuerpo te pide siesta jajajaja, la verdad es que es bastante modulable, por lo que bajando cantidades o subiendo se puede tomar tanto en la comida como en la cena.
Ingredientes (3 o 4 Personas)
- 1 Cebolla
- 1 Pimientos verde
- 1 Pimiento rojo
- Tomate frito (casero o 0%)
- Latas de atún (1 por persona mínimo)
- Berenjenas (1 o 2), también se puede cambiar por calabacín
- Puerro (opcional)
- Queso light que se pueda rallar o venga rallado (también sirven los tranchetes)
- Aceite de Oliva
- Sal, Pimienta y orégano
Receta:
- Lavamos y cortamos todas las verduras, para que se cocinen todas a la vez es importante que los trozos sean similares en tamaño.
- Precalentamos nuestro horno a 180 grados centígrados, calor arriba y abajo o sólo arriba ya que vamos a gratinar.
- Añadimos 2 o 3 cucharadas de aceite de oliva a la sartén y rehogamos nuestras verduras, menos la berenjena (típico sofrito pero con menos aceite). Salpimentamos.
- La berenjena la haremos en el microondas, las partimos en dos, hacemos cortes profundos en la piel y la metemos 7 minutos a máxima potencia, una vez transcurrido el tiempo, con una cuchara, vaciamos la berenjena en nuestro sofrito y terminamos de cocinar todo juinto, con un par de minutos es suficientes. Cocinando la berenjena a parte evitamos que absorva todo el aceite y deje el resto de verduras cocidas o crudas.
- Una vez estén listas, añadimos el tomate frito y las latas de atún (al natural o en aceite de oliva escurridas). Mezlcamos bien y lo ponemos en una fuente de horno.
- Ahora toca añadir nuestro queso light, yo suelo usar muchas especias, por ejemplo siempre que uso salsa de tomate le añado unas especias italianas que tengo u orégano, ajo en polvo, picante...esto ya lo dejo a vuestro gusto.
- Ya sólo nos queda meter la bandeja y mirar con ansia viva a través del cristal del horno a que nuestro queso se funda y se mezcle todo, ya tenemos nuestro pastel listo!!